Antes de irnos de vacaciones de Semana Santa hemos querido hacer una excursión toda la Primaria del colegio. A principio de curso nos habíamos propuesto varias actividades para el año que nos esperaba, y una de ellas era la visita de un pueblo. En un pueblo las cosas son de otra manera, la forma de vivir es más tranquila, las costumbres nos llaman la atención en estos tiempos que corren, por eso decidimos visitar un pueblo de la provincia de Córdoba. Y el elegido fue CABRA.
En el Centro Geográfico de Andalucía y en pleno Parque Natural de las Sierras Subbéticas, se encuentra Cabra, Ciudad con gran patrimonio monumental, en su mayoría procedente del barroco, tradiciones y fiestas, custodiada por sierras, manantiales y parajes naturales de gran relevancia. Debido a su situación Geográfica, y su red de alojamientos que van desde las más equipadas casas rurales hasta los hoteles de tres y cuatro estrellas, Cabra se convierte en un punto de partida inmejorable para conocer Andalucía, pues la playa, el ocio y el turismo monumental nos esperan a una media de una hora de esta ciudad del sur de Córdoba. Descansando en un lugar privilegiado, de noches apacibles y divertidas y con gentes que te sorprenderán por su hospitalidad y agrado.
Contamos con la ayuda y colaboración de dos técnicos de la Oficina de Turismo, Sergio y Fran que nos enseñaron la ciudad con mucho gusto. En primer lugar nos encontramos en el Paseo, fuimos al Museo Aguilar y Eslava para luego ir a la Parroquia de la Asunción y al Barrio de la Villa, un paseo cargado de encanto, que nos dejaron unas fotografías preciosas.
Las niñas y niños del colegio se lo pasaron en grande, porque no están acostumbradas a la libertad que da caminar y recorrer un pueblo, en donde todo el mundo se conoce, en donde todo es tranquilidad y bienestar. Una gozada para los últimos días de colegio
Visitamos la Parroquia de la Asunción, una joya del barroco andaluz en donde se preparaban los tronos y pasos de Vírgenes y Cristos para la Semana Santa.
Por lo que nos comentaron es una Semana Santa estupenda, aun siendo un pueblo tiene más de 30 pasos, con unos tronos preciosos, y unos pasos cargados de detalles, con una imagineria muy digna de una Semana Mayor
Para concluir la visita tuvimos la suerte de adentrarnos en el barrio de la Villa, una maravilla de calles a estilo judería con unos balcones cargados de flores, macetas y muchos, muchos colores. Ha sido precioso pasear por este lugar, me ha recordado a los patios de Córdoba, a nuestro Mayo cargado de primavera
Al final de la visita la Fuente el Avellano, un agua fresca, cristalina y muy ansiada para el día de calor que pasamos.
Por último, el colegio de Escolapias de Cabra nos acogió con muchas ganas, nos cedieron sus instalaciones y nos enseñaron su colegio, que es un maravilloso castillo medieval.
El actual convento-colegio de las Madres Escolapias se encuentran construido sobre los restos del antiguo Castillo, en la parte alta del barrio de la Villa, y sobre la que también fuera casa-palacio de los Duques de Sessa y Condes de Cabra.
Esta fortaleza de origen árabe fue reedificada en el siglo XIV. Fue conquistado por San Fernando y tuvo gran importancia en las campañas bélicas de Umar IBn Hafsum y los califas de Córdoba. En él nació Enrique II. La Villa de Cabra fue solar de una rama de la Casa de Aguilar; los Condes de Cabra, Duques de Baena, Condes de Altamira y Marqueses de Astorga. Fue construido dentro del recinto amurallado.
Una visita preciosa, un día espectacular y unas
VACACIONES MERECIDASSSSSSS
